Alarte y Pajín ahondan en su brecha y ponen de manifiesto el penoso estado del PSOE en la Comunitat Valenciana

Fuente: P.Rostoll - Diario Información

Ha sido con la moción de censura de Benidorm. Pero, de no haber sido ahora, las diferencias entre Jorge Alarte y Leire Pajín -la UTE que ganó el congreso del PSPV hace ahora un año- hubieran aflorado más adelante. Alarte y Pajín han ahondado su brecha, un divorcio que se escenificó ayer con una operación que fue recibida entre el fuerte rechazo de la cúpula de los socialistas valencianos y la ambigüedad cuando no, incluso, la comprensión de Ferraz. Los concejales socialistas de Benidorm, con la maniobra de pedir su baja como militantes -algo que tienen previsto tramitar hoy-, se garantizan la opción de solicitar su reingreso antes de las elecciones de 2011. Leire Pajín, como secretaria de Organización del PSOE, tendrá la última palabra sobre el futuro de los ediles, entre ellos su propia madre y el nuevo alcalde, Agustín Navarro, que dimitirá en la Diputación. Con la baja de militancia -que obligará a remodelar la ejecutiva provincial y la local de Benidorm-, los concejales esquivan ser expedientados y una sanción disciplinaria -como mínimo, una suspensión temporal de militancia- que les dejaría sin opción de concurrir a los comicios locales de dentro de 20 meses. Con ello, tienen las manos libres para gobernar -el nombre del grupo puede ser el de Socialistas de Benidorm en el caso de que no puedan seguir con las siglas del PSOE- y, cuando el temporal escampe, solicitar su reingreso limpios de cualquier sanción. Y eso es, precisamente, lo que harán. "Gobernaremos como socialistas. No queremos hacer daño al partido y así podremos volver", apuntaron desde el grupo municipal. Fuentes del PSOE apuntaron que no hay nada pactado pero que Ferraz sí es conocedor de la fórmula que se iba a utilizar. En cualquier caso, el actual escenario, deja muchas vías abiertas a los concejales. Pero Alarte volvió a rechazar ayer de plano no sólo la moción de censura sino cualquier posibilidad de que los ediles regresen al PSPV o a las listas electorales. "Los que vulneran el pacto antitransfuguismo dejan de ser del PSOE", subrayó Alarte que, posteriormente, ratificó a este periódico, como en otras ocasiones, que "ninguno de los concejales volverá a figurar en una lista socialista. En Benidorm ya no tenemos representación en el consistorio". La contundencia de Alarte no encontró eco en Ferraz. Antes de que se registrara la moción de censura, Leire Pajín, a Radio Nacional, sí ratificó que iría contra los ediles que pactaran con tránsfugas "se apellidaran como se apellidaran". Luego, silencio de Pajín y una ambigüa y tibia nota de Ferraz que se limita a desautorizar la moción y a pedir a los ediles que reconsideren. Ni condena ni aviso a los concejales de que no retornaran a las filas socialistas. Todo ello, a modo de justificación, con abundante documentación sobre las mociones de censura con tránsfugas de las que ha salido beneficiado el PP. En Ferraz, además, valoran el gesto de los concejales de solicitar la baja para no dañar al partido y de garantizar la gobernabilidad. A Alarte no le gustó esa reacción. Hubo conversaciones entre Leire Pajín y el secretario del PSPV que también telefoneó a Ana Barceló, afín a Pajín y partidaria de la moción de censura, para que la dirección provincial rechazara la operación, algo que hizo con un comunicado calcado al de Ferraz. Alarte sí logró que Antonio Hernando, secretario de Política Local del PSOE y hombre de José Blanco, avalara a última hora de la tarde su tesis y saliera a la palestra para decir que los ediles socialistas no volverán a figurar en ninguna candidatura aunque, eso sí, también criticó al PP "porque no nos pueden dar lecciones". Leire Pajín no rompió su silencio. La batalla de las listas electorales llegará dentro de año y medio. Y la candidatura de Benidorm no la ratifica Valencia sino que es competencia del comité federal de listas. ¿Quién lo preside? Leire Pajín.

PP Callosa d'en Sarrià: Conclusión, que el afán de poder y notoriedad es tal que hasta renuncian a los colores de la "selección" para poder apoltronarse en Benidorm. Luego está la letra pequeña, por supuesto pactadísima: Vosotros renunciad y en el 2011 volveis a solicitar el ingreso en el partido y todo arreglado porque los ciudadanos no se enteran!!. A los ciudadanos de Benidorm les esperan 20 meses desastrosos. Que a nadie le quepa duda que despues de esta exhibición de formas y ansia de poder, el PP de Benidorm volverá a gobernar la ciudad en 2011 con una nueva mayoría absoluta. Por cierto.... ¿Algún que otro socialista de Callosa ya le habrá tocado a la puerta a Agustinet solicitandole un "puestecito"? El tiempo nos lo confirmará....