FUENTE: El Mundo.es - José Ramón García Antón, conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda de la Generalitat Valenciana, iba a cumplir 61 años cuando le ha sorprendido la muerte en su pueblo natal de San Vicente. Falleció de forma repentina. Pese a estar en pleno mes de agosto, por la mañana había realizado una visita oficial a unas obras hidráulicas en la localidad alicantina de Aspe. Durante más de 23 años dio clases como profesor de la Universidad Politécnica de Valencia en el departamento de Ingeniería Hidráulica. Desde su profundo conocimiento de la problemática del agua defendió la necesidad de trasvasarla racionalmente dentro de un plan compensado de apoyo entre cuencas hidrográficas. El propio Gobierno de Aznar le consultó a la hora de diseñar el Plan Hidrológico Nacional. La reutilización de aguas residuales y las desalinizadoras sólo eran para él un "apoyo y para situaciones especiales", pero nunca un sustituto de los trasvases, por sus ventajas medioambientales y su carácter vertebrador. Nunca perdió su halo de hombre trabajador, honesto y buen conocedor de los asuntos que eran de su competencia. Esas virtudes llevaron a Eduardo Zaplana a nombrarle director general de Obras Públicas en 1995. Sólo tres años después ya era nombrado titular de esa Consejería. Francisco Camps le renovó en el cargo hasta 2007, año en el cambió de cartera para dirigir el departamento de Medio Ambiente. Durante su más de una década como conseller tuvo la virtud de llevarse bien con toda la oposición. Su mirada sonriente y bonachona, pero también su firmeza, fuerza y convicciones, le hicieron muy popular entre los políticos valencianos. El repentino fallecimiento del conseller de Medio Ambiente, José Ramón García, ha conmocionado a la clase política valenciana. Desde que se conociera el óbito no han dejado de sucederse las muestras de apoyo a la familia. Todos los grupos políticos han alabado la figura de este ingeniero alicantino, reconocido por su destacado perfil técnico y su compromiso con la lucha contra la sequía. Los primeros, sus compañeros de partido, que han traslado a sus allegados "su más sentido pésame" así como "su total y profundo apoyo en estos durísimos momentos". Desde la Diputación de Valencia, su presidente, Alfonso Rus, ha hecho hincapié en la capacidad en la "calidad humana" del dirigente alicantino, uno de los políticos más apreciados dentro y fuera de las Cortes. De hecho, al otro lado de la 'trinchera política' se han repetido las muestras de dolor. En representanción de los socialistas valencianos, su secretario general, Jorge Alarte, ha expresado la "consternación" de su partido ante esta "repentina pérdida". El portavoz del PSPV en la Diputación de Alicante, Antonio Amorós, va todavía más allá. Para los socialistas alicantinos el conseller García Antón, representa "un ejemplo de honestidad" para la política. Por su parte, la portavoz de Compromís, Mónica Oltra, ha destacado la preparación profesional y la dedicación de García Antón "a pesar de las diferencias políticas y de criterio". Su trayectoria profesional como ingeniero y profesor de la Universidad Politécnica, su preparación y conocimientos, permitía tener con él debates en los que siempre aportaba información relevante en su departamento. Por la capilla ardiente han pasado, además de su esposa, la alcaldesa de San Vicente del Raspeig, Luisa Pastor, los vicepresidentes del Consell Gerardo Camps y Juan Cotino, el titular de Infraestructuras, Mario Flores, y la presidenta de las Cortes, Milagrosa Martínez.
Desde el Partido Popular nos sumamos al dolor de la familia por la pérdida de este gran alicantino que siempre se preocupó por el agua de Callosa y sus Comunidades de Regantes. D.E.P.
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